Memes y debates

Héctor M. Magaña

El debate tuvo éxito de algún modo: solo hay que navegar en internet para vislumbrar un poco la gran cantidad de memes al respecto. Y sí. Uno puede decir que los jóvenes no están interesados en la política, que los memes reducen todo a bufonería y a la comicidad. Nada serio.

Los memes del debate, por contradictorio que parezca, son en realidad el mejor índice: el burlado, el objeto de las risas lo es por varias razones: 1) no convence, 2) es torpe para exponer ideas, para usar sus materiales o porque simplemente no contesta las preguntas y 3) por la pantomima que se usa para ahorrarse palabras que pueden usarse en su contra y crear en aire de “complicidad”.
Es decir, que para el televidente lo que está viendo es la confirmación de lo que ha visto todo el tiempo: que el político promedio les toma el pelo, y ellos frente a la televisión y con un espíritu carnavalesco, hacen lo propio: la burla, el chista, la broma, el meme.

Claudia Sheinbaum tuvo pocos memes (o al menos eso percibieron varios, incluyéndome), Xóchitl Gálvez y Jorge Máynez se llevaron la victoria en memes. ¿A qué se debe? Quizás y porque el comportamiento “frío y sin corazón” de Sheinbaum no permitía la comicidad, mantuvo la compostura; Gálvez flaqueó, su nerviosísimo la hizo ver robótica y sus ataques murieron ante las respuestas parcas de Sheinbaum; Máynez, por otro lado, fue todo sonrisas, pantomima y frases gastadas, el televidente se sació de memes a gusto con actuación.

Para concluir. El público en general tuvo dos grandes posturas: 1) el debate los decepcionó porque nadie contestó con las preguntas con satisfacción y 2) pese a la insatisfacción por las respuestas dadas, el público notó que al menos por parte de Claudia hubo una actuación más inteligente y preparada.
El meme en el debate: es un indicio de lo que el televidente percibe. Schopenhauer decía que la comedia es cuando alguien pone algo o a alguien en un lugar o situación que no concuerda. Basándonos en ello, ¿qué podemos decir de Gálvez y Máynez?